Escriben Melissa Capcha* y Vanessa Bolivar**


La innovación climática es uno de los mayores retos a los que se enfrenta actualmente el mundo. Los científicos han afirmado que para alcanzar el objetivo de no más de 1,5 °C sería necesario reducir nuestras emisiones a cero para el año 2050. Para alcanzar este objetivo, la innovación tecnológica tanto en el ámbito de la mitigación como en el de la adaptación resulta esencial. Sin embargo, todavía tenemos que innovar no sólo en el ámbito de la energía o de la industria, sino también en otros ámbitos clave, como las finanzas y la política. Este último crearía los marcos legales para introducir estas soluciones innovadoras en la sociedad.

La innovación se define como la realización de cambios en algo establecido, especialmente mediante la introducción de nuevos métodos, ideas, tecnologías, productos, etc. ¿La pregunta es se puede también innovar en la búsqueda de soluciones para hacer frente a la crisis climática? ¿Representa esto una oportunidad para desarrollar nuevas propuestas de procesos, servicios, metodologías o productos que tengan un impacto positivo en el clima? Y especialmente relevante para nosotros en la región, ¿cómo vamos en América Latina en el tema?

Por un lado, los países de América Latina estamos ya viviendo los impactos del cambio climático en actividades como la agricultura y el abastecimiento de agua potable, así como los efectos de la intensificación de sequías, lluvias y heladas; sin embargo, estamos en desventaja en la capacidad para transferir, desarrollar y desplegar tecnologías climáticas innovadoras en comparación con los países llamados desarrollados.

Entre las causas, existen barreras administrativas, financieras y también educativas. Estas barreras se ven agravadas por presiones adicionales sobre los países en desarrollo, como las altas tasas de pobreza, las grandes brechas de infraestructura y la necesidad urgente de desarrollo económico a toda costa. En conjunto, estos factores hacen de América Latina el receptor de tecnologías desarrolladas en otros lugares que, en muchos casos, no se adaptan a las condiciones locales, y también impiden que la región explote el potencial económico de uno de los sectores más prometedores del siglo XXI.

Oportunidades y retos de la innovación climática en la región

En el 2018, en el marco de la Conferencia mundial del Clima COP24 en Katowice (Polonia) se llevó a cabo el foro “Oportunidades y retos de la innovación climática en América Latina”, en el cual se presentaron además ejemplos de innovación climática desarrollados en la región. Bajo la organización de las ONG Centro de Innovación Climática y Sostenibilidad junto con Climate Action Network y el soporte de Green Peace Polonia, Víctor Campos, director ejecutivo del Centro Humboldt Nicaragua, Miguel Trejo, coordinador del Grupo de Trabajo de Reducción de riesgo a desastres de la Water Youth Network, Rodrigo Andrade, director regional de la ONG Diálogo Energético de Chile, y Melissa Capcha, presidenta de la ONG Centro de Innovación Climática y Sostenibilidad participaron de una mesa de diálogo. En la cual expusieron los principales retos y oportunidades que actualmente enfrentan relación con el tema de Innovación climática.

Se identificaron tres puntos clave a considerar como oportunidades en la región: El retorno al trabajo colaborativo y en comunidad para brindar soluciones que no solo beneficien a un individuo sino a todos. El aprovechamiento y mayor inversión en el potencial de energías renovables en la región, en especial en cuanto a energía solar y de viento. La oportunidad de recuperar el conocimiento ancestral de las comunidades nativas y aplicarlo para hacer frente a las actuales amenazas climáticas, desde una visión científica y metodológica.

Por otro lado, los retos identificados fueron: Evitar caer en la idea de la aplicación de fórmulas mágicas, metodologías o tecnologías importadas de países en desarrollo sin considerar las necesidades y capacidades locales. Por otro lado, atraer inversión para educación e investigación en temas relacionados con cambio climático en la región con el propósito de promover soluciones generadas por los mismos actores involucrados en el problema. El mayor reto es que la región rompa la dependencia económica basada en el uso de la explotación de combustibles fósiles para dar paso a un futuro con energías renovables.

Casas Calientes para combatir heladas. Foto: Andina


¿Por qué es importante la innovación climática en América Latina?

En palabras de Manuel Pulgar Vidal, director del Programa Internacional de Clima y Energía de WWF y exministro del Ambiente del Perú, con mayor apoyo a la tecnología e innovación vamos a ser más capaces de construir una sociedad más resiliente al cambio climático. Asimismo, el expresidente de la COP20 en Lima resalta que la innovación no solo se aplica a nivel de gobierno, en los planes de crecimiento económico, sino que también se debe aplicar en el día a día de las personas. Ejemplos concretos son los avances en materia de energías renovables, eficiencia energética, y el uso de autos eléctricos.

En entrevista exclusiva para el Centro de Innovación Climática y Sostenibilidad en Katowice, Pulgar Vidal indicó que “las medidas vinculadas al cambio climático buscan reducir efectivamente las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) pero manteniendo el crecimiento económico, este balance solo es posible de alcanzar a través de la innovación“. Además subrayó que la innovación y sus mecanismos de implementación son el único camino para que países como Perú sean sostenibles en el tiempo.



* @melissacapcha ** @vanebolivarperu